México, 24 jul (Prensa Latina) El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, calificó hoy de lamentable lo que revela el exdirector de la empresa estatal petrolera Pemex, Emilio Lozoya, extraditado desde España quien ya coopera con las autoridades como testigo protegido.
Es muy lamentable lo que se está dando a conocer en el caso de Lozoya, quien también trabajó en la empresa española Obrascón Huarte Lain, S.A. (OHL) que obtuvo contratos del gobierno de México bajo el mandato del expresidente Enrique Peña Nieto.
Su exdueño, Juan Miguel Villar Mir, presidente del Grupo Villar Mir, corporación que agrupa a todas sus empresas, incluida la constructora OHL, sigue siendo objeto de investigación por sobornos y otros delitos.
Ya se sabe que hubo sobornos, dijo el mandatario, ya esto se había dado a conocer en juzgados de Estados Unidos por testigos protegidos que involucraron a distintos gobiernos de América Latina.
Se actuó en varios países y fueron a la cárcel funcionarios públicos, pero en México se tapó el asunto y hubo impunidad, hasta ahora.
Pero desde las primeras declaraciones Odebrecht admitió que entregó sobornos en México por 10,5 millones de dólares. A él se le dio un trato preferente porque construyo una planta de etileno en Veracruz mediante contratos muy beneficiosos que le otorgó Pemex para venderle gas a precios muy bajos.
Era el que Pemex utilizaba para abastecer las plantas petroquímicas y las dejó sin gas. El contrato era que si no cumplía con las entregas tenía que pagar multas, y desde que llegamos por lo leonino de estos contratos dejamos de pagar esas multas abusivas, pero existen los contratos todavía.
Tal era el compromiso del gobierno de México que Odebrecht llegó a celebrar una reunión de su consejo de administración en la residencia oficial de Los Pinos antes de que Peña Nieto llegara a la presidencia de la república.
Luego ya se sabe que Peña Nieto utilizó dinero de Odebrecht para financiar su campaña electoral. Nosotros presentamos denuncias al respecto en ese entonces que no fue aceptada. Lo digo para poner en contexto lo que ahora Lozoya está dando a conocer, para demostrar que la llamada reforma energética fue comprada con esos dineros.
Se repartió dinero a legisladores de partidos para ello y sería bueno saber cuánto y a quiénes, porque una cosa son los 10,5 millones entregados a Lozoya y otro el dinero vinculado a este manejo ilegal, lo que se utilizó para comprar y sobornar a legisladores y que se aprobara la reforma energética en el llamado Pacto por México.
Allí se incluye, dijo, la compra de una planta de fertilizantes inservible y a un sobreprecio de 200 millones de dólares. Se comprometió a que no solo que se castigue a los culpables, sino que se denuncien públicamente.
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