Londres, 10 ago (Prensa Latina) El primer ministro británico, Boris Johnson, aseguró hoy que quiere trabajar con Francia para frenar la ola de inmigrantes ilegales que en los últimos días intenta llegar al Reino Unido a través del canal de La Mancha.
No hay dudas de que sería beneficioso poder trabajar con nuestros amigos franceses para impedir que (los inmigrantes) crucen el Canal, expresó Johnson, en declaraciones a periodistas durante un recorrido este lunes por una escuela del este de Londres.
El gobernante conservador, quien acusó a las bandas detrás del tráfico de personas de arriesgar la vida de los migrantes en el estrecho que separa a Inglaterra de la costa norte de Francia, también abogó por endurecer las leyes migratorias británicas.
Tenemos que pararlos trabajando con Francia, pero en segundo lugar necesitamos revisar el marco legal que tenemos, toda esa panoplia de leyes a disposición de los inmigrantes ilegales que les permiten quedarse aquí, remarcó.
El ministro británico de Inmigración, Christopher Philp, tiene previsto viajar este martes a Francia para abordar el tema de los migrantes ilegales con su contraparte del país galo, después de reportarse un aumento considerable en el número de personas que intentan llegar al Reino Unido desde el puerto francés de Calais, a bordo de embarcaciones pequeñas y frágiles.
Según la televisora Sky News, que reportó este lunes la llegada de un bote con 20 inmigrantes a Dover, alrededor de 700 inmigrantes ilegales llegaron a territorio británico en los últimos cuatro días.
Tras la avalancha de personas que tratan de aprovechar el buen clima reinante para cruzar de la mano de los traficantes, Londres solicitó el apoyo de la Marina británica para interceptar los botes y hacerlos regresar a Francia, confirmaron fuentes del ministerio del Interior.
De acuerdo con la prensa local, cerca de cuatro mil emigrantes ilegales llegaron al Reino Unido en lo que va de año a través del canal de La Mancha, conocido en inglés como English Channel.
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