La represión ocurrida en 1968 se convirtió en uno de los pasajes más oscuros en la Historia de México.
Ciudad de México; 02 de octubre de 2020.- La noche del miércoles 2 de octubre de 1968 fue como ninguna otra; la represión vivida ese día manchó de sangre la Historia de México, convirtiéndose en uno de los acontecimientos más oscuros y dolorosos para el pueblo mexicano.
Aquel día, un grupo de estudiantes de reunió en la Plaza de las Tres Culturas, en Tlatelolco, para llevar a cabo una manifestación pacífica, sin embargo se vio interrumpida por la presencia de militares en los alrededores, así como como de grupos infiltrados.
Los jóvenes estudiantes se reunieron en la Plaza de las Tres Culturas para protestar contra el autoritarismo que perneaba en la vida política del país. También, exigían la desaparición del cuerpo de granaderos y la destitución de los jefes de policía de la capital mexicana.
Posteriormente se constituyó el Consejo Nacional de Huelga (CNH), conformado por más de 200 estudiantes de 75 escuelas y leerían un pliego petitorio con sus demandas para el gobierno de aquel entonces.
El Gobierno temía que los estudiantes tomaran la Torre de la Secretaría de Relaciones Exteriores que se encontraba justo en la zona.
Todo transcurría de manera tranquila hasta las 6:10 pm, cuando dos bengalas iluminaron el cielo, provocando el desconcierto de los presentes, pero la orden era inminente de disparar contra todo aquel que se encontraba en el lugar.
El Batallón Olimpia fue el encargado de disparar a los estudiantes, quienes vestidos de civiles rodearon y disolvieron con disparos el movimiento. Su distintivo era un pañuelo o guante blanco.
Cuando inició la agresión, los estudiantes corrieron a esconderse en los edificios aledaños a la Plaza de las Tres Culturas. Muchos estudiantes y civiles fueron detenidos y enviados a diversas cárceles; esa noche, muchos estudiantes desaparecieron, sin que hasta la fecha se tenga idea de dónde están.
Cabe mencionar que, el 12 de octubre de ese mismo año, se llevó a cabo la inauguración de los Juegos Olímpicos, bautizados como “La Olimpiada de la Paz”. Además, 1968 es uno de los años con más movimientos sociales en el mundo.