México, 9 abr (Prensa Latina) El Gobierno de México reconoció hoy la violencia en la campaña proselitista para las elecciones intermedias del 6 de junio.
En la conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador en el Palacio Nacional, el tema fue abordado por la secretaria de Seguridad Nacional, Rosa Icela Rodríguez.
La funcionaria dijo que a los candidatos se les protege para que no pierdan la vida y al respecto se lleva a cabo un protocolo para protegerlos a todos, un trabajo muy intenso porque significan muchos miles de aspirantes.
Icela Rodríguez explicó que las acciones de protección se ejecutan mediante la formación de mesas de trabajo, cuyo objetivo es prevenir y sancionar la violencia política y proteger candidatos amenazados por el crimen organizado y de cuello blanco.
Aseguró que gracias a este mecanismo todos los candidatos a los 21 mil cargos públicos no están solos, se protegen sus derechos políticos y no se permitirá que «el partido del crimen» (en referencia a los delincuentes) sea el que decida estas elecciones.
Dijo que hay una intensa colaboración con los gobernadores de los 32 estados, los secretarios de seguridad y otros funcionarios estatales en esas mesas de trabajo.
Hay un protocolo de atención luego de que el perjudicado reporte las amenazas que les hacen y a partir de ese momento se coordinada el trabajo de protección. Se establece un esquema de amparo con intervención federal y estatal.
Según las últimas cifras, señaló, la secretaría recibió 117 avisos de agresión, 71 de ellos hombres, que involucran a más de un aspirante. 41 tienen medidas de protección, 22 de ellos con respaldo militar o policial directo, y hay 58 casos de acción o amenaza de violencia particular contra ellos.
Explicó que 82 por ciento de las amenazas es a candidatos a cargos medios como alcaldías y ejidos, que es donde opera con mayor efectividad y violencia el crimen organizado, pues en esos niveles tiene el control de los mercados de drogas y de otros delitos, desde extorsión hasta diversos tipos de robos y secuestros.
Aspiran en estas elecciones colocar a sus candidatos encubiertos y difíciles de detectar, aunque algunos han sido descubiertos y aprehendidos.
Admitió que a pesar de la vigilancia, el despliegue policial-militar y el funcionamiento de las mesas de trabajo, ha habido asesinatos y se espera que ninguno de los casos quede impune.
Denunció que el crimen organizado y de cuello blanco buscan incidir en las elecciones para consolidar su control territorial en medio de una gran guerra entre los carteles que protagonizan una violencia muy cruel.