México, 23 jul (Prensa Latina) Más de 400 artistas, políticos, intelectuales y activistas del mundo enviarán hoy una carta al presidente estadounidense, Joe Biden, para pedirle el levantamiento del bloqueo y las sanciones que afectan a Cuba.
El diario de México La Jornada señala en su versión dirigital que al respecto se publicará este viernes un texto en The New York Times, el cual constituye un llamado público urgente para deshacer las políticas crueles implementadas por la administración del exmandatario Donald Trump, quien sumó 243 nuevas sanciones contra la isla.
«Nos parece inconcebible, subraya la misiva, especialmente durante una pandemia, bloquear intencionalmente las remesas y el uso por parte de Cuba de las instituciones financieras globales, algo necesario para la importación de alimentos y medicinas».
El documento, disponible en la plataforma https://www.letcubalive.com/, recoge firmas como la del lingüista Noam Chomsky, el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva; el exmandatario ecuatoriano Rafael Correa, y el exrector de la UNAM, Pablo González Casanova.
Igualmente, el llamado contra el bloqueo tiene el respaldo del británico Jeremy Corbyn; del reverendo Jim Winkler, del Consejo de Iglesias de Estados Unidos; del teólogo brasileño Frei Beto y del Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel.
Figuran también entre los firmantes los actores estadunidenses Danny Glover, Susan Sarandon, Jane Fonda y Mark Ruffalo, y organizaciones como Codepink y Black Lives Matter.
«Apoyamos al pueblo cubano», expresó Biden el pasado 12 de julio, pero las personalidades en su carta le recuerdan que, si ese es el caso, «debe revertir las restricciones de Trump y dejar de tratar a Cuba como un enemigo existencial en lugar de un vecino».
«Reanude la apertura y comience el proceso de poner fin al bloqueo», sugieren al tiempo que advierten sobre cómo el 23 de junio la mayoría de los Estados miembros de la Organización de Naciones Unidas votaron por levantar las sanciones a la isla.
Finalmente, instan al actual jefe de la Casa Blanca a retomar el camino impulsado por el expresidente Barack Obama, quien en sus últimos años de mandato impulsó un proceso de normalización de las relaciones entre Washington y La Habana.