México, 1 sep (Prensa Latina) Las críticas contra agentes de la Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración de México que reprimieron a migrantes en la frontera sur con Guatemala, continúan hoy en la prensa.
Los hechos ocurrieron ayer en Chiapas cuando miembros de ambos cuerpos reprimieron a unos 300 migrantes de varios países, quienes pretendían llegar a pie o en camiones a la frontera norte para intentar ingresar a Estados Unidos.
Imágenes de agentes de inmigración golpeando a extranjeros fueron divulgadas en los medios de prensa escritos y la televisión publicó vídeos del atropello, un hecho inusual pues la política del Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador es todo lo contraria y su lema es «nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho», violado en esta oportunidad.
De acuerdo con los reportes de prensa, más de un centenar de personas están detenidas y las demás no pudieron avanzar hacia el norte mexicano como deseaban.
La primera en hacer un llamado de alerta fue la titular de la Comisión Internacional de Derechos Humanos, Michelle Bachelet, aun cuando su crédito al frente de esa institución de la ONU, es muy bajo en este país, pero sirvió de apoyo a una campaña inmediata de la oposición política mexicana.
Según los reportes, se trató de un grupo calculado en 300 centroamericanos y haitianos que pernoctaron en el parque central de la localidad de Mapastepec en su marcha a la frontera con Estados Unidos.
Las autoridades federales investigan los inusuales sucesos tan contrarios a la política aplicada hasta ahora por el Gobierno central, y buscan saber de quién fue la nefasta iniciativa.