Ante violaciones graves a los derechos humanos, a la integridad personal y trato digno, por actos de tortura e incomunicación, en agravio de Mario Aburto, asesino confeso de Luis Donaldo Colosio, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos recomendó a la Fiscalía General de la República reabrir el caso para subsanar deficiencias y llegar al pleno esclarecimiento de los hechos.
La CNDH indicó que actualmente la víctima se encuentra recluida en el Centro Federal de Readaptación Social número 12 en el municipio de Ocampo, Guanajuato, donde incluso, se le prohibió establecer comunicación.