Washington, 9 nov (Prensa Latina) El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, enfrentará fuertes retos a finales de este año, anticipan hoy medios de prensa y expertos.
A los desafíos de un invierno que pudiera ser muy frio, votaciones claves en un Congreso donde los demócratas están divididos, el mandatario tiene ante sí el desafío del cuello de botella que se formó en los últimos meses en los principales puertos del oeste del país, Los Angeles y Long Beach.
Un invierno difícil señala el diario The Hil en su aproximación al tema. Los cuellos de botella en la cadena de suministros, provocados por el aumento de la demanda, amenazan con retrasar los regalos de Navidad, preciso la publicación.
Las empresas, agregó, se enfrentan a la escasez de mano de obra, lo que probablemente provoque inconvenientes a los estadounidenses que viajen durante la temporada navideña pese a que hay fuerza de trabajo disponible en el país.
El aumento de los precios de la gasolina se sumará a esos dolores de cabeza, y ahora los funcionarios de la administración advierten que la calefacción de los hogares también costará más este año, algo que dispara las alarmas.
Por otra parte, expertos indican que encuentros en el interior de los hogares y centros de recreación pueden provocar una mayor exposición al coronavirus que causa la Covid-19, otro problema cuando en muchos estados del país hay resistencia al uso de mascarillas y a la vacunación.
Biden vio caer sus cifras de aprobación en medio de unos meses difíciles para su administración y cualquier falla en enfrentar estos desafíos lo pudiera hundir más camino a las elecciones de medio término donde peligrara el control demócrata del Congreso.
«Es bastante sombrío», dijo un estratega demócrata que habló con The Hill. «No creo que la gente se dé cuenta de dónde estamos como partido ahora mismo».
Biden cerró la semana pasada con algunas buenas noticias, señalo la publicación. Un informe positivo sobre el empleo comenzó bien la jornada del viernes, y la Cámara de Representantes aprobó finalmente un proyecto de ley de infraestructuras de un billón de dólares al final del día, que es una parte clave de la agenda del presidente.
Por otra parte, la secretaria de Energía, Jennifer Granholm, adelantó que el gobierno valora acudir a las reservas estratégicas de petróleo de la nación para hacer frente al aumento de los precios del combustible, decisión que podría tomarse hoy después de que se publique una nueva proyección del Departamento de Energía sobre los precios de la gasolina.