El impacto fiscal que puede traer a Acapulco el daño ocasionado por el huracán Otis, cambió la calificación de “Perspectiva Positiva” a “Revisión en Proceso” para el puerto, explicó Álvaro Rodríguez, director de Finanzas públicas y deuda soberana de HR Ratings.
Señaló que “existirá una desviación muy probable en el tema de ingresos, gastos y necesidades de recursos (ante el golpe del ciclón)… creo que es algo muy intuitivo, por eso revisamos este cambio de calificación”. En entrevista, comentó que más que una rebaja de la calificación, se trata de una revisión a la espera del recuento de daños y esperar la estrategia a seguir por parte del municipio y las autoridades federales, algo que puede durar hasta “nueve meses”, aseguró.
Puntualizó que el deterioro de las finanzas tendrá que ser evaluado con el comportamiento de los ingresos del municipio y la restauración de servicios en un futuro. La calificadora destacó que los daños a la infraestructura hotelera y al turismo, la principal actividad económica del puerto, pueden modificar la recaudación de impuestos y las necesidades de gasto consideradas en la última acción de la calificación.
En tanto una reducción en los ingresos de libre disposición que suman: los ingresos propios locales, participaciones federales, así como los recursos del Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas y una menor liquidez, afectarán negativamente las métricas de endeudamiento (el crédito sobre su presupuesto).
Álvaro Rodríguez detalló que la principal fortalezas es que Acapulco se mantenía hasta antes del impacto de Otis “sin uso de financiamiento de corto plazo…” , abundó. Insistió que será la información oficial sobre cálculos de daños y la estrategia fiscal que se emprenda para el municipio lo que determine si existe un impacto en la calidad crediticia. A pesar de que tendrán que esperar para revisar una nueva calificación, HR Ratings consideró que los daños del huracán representan un estrés financiero adicional a las finanzas locales, debido a que se anticipa una probable contracción de todas las actividades económicas.
La calificadora estimó que la necesidad de asistencia social puede incrementar algunos capítulos de gasto como lo son el de transferencia de subsidios, así como materiales y suministros. Esta situación, alertó, puede crear un déficit sobre el balance de los ingresos totales proyectados de 1.9% de 2023 a 2025.
Rodríguez detalló que apenas en julio pasado se había elevado la calificación al puerto a “Perspectiva positiva” con la información que se tenía hasta ese momento, pero ahora el panorama es distinto y habrá que esperar el comportamiento, que no sólo depende de las autoridades, sino de todas las partes involucradas para la recuperación de Acapulco.
La calificadora destacó que se revisará primero el recuento y el uso que se prevé de recursos provenientes de diferentes fuentes para atender la contingencia.
Para ayudar a la reactivación económica del puerto, la firma calificadora HR Ratings consideró que serán tomados en cuenta el uso del Bono catastrófico emitido a través del Banco Mundial, con una cobertura por un monto equivalente a 8 mil 730 millones de pesos, así como otros seguros catastróficos contratados por 5 mil millones de pesos.
Finalmente agregó que también se considera que para que el balneario logre volver a la normalidad se disponga del uso de recursos del Fondo para Desastres Naturales (Fonden) con un monto aprobado en el Presupuesto de Egresos de la Federación en 2023 hasta por 17 mil 156 millones de pesos. Aunque la calificadora resaltó e hizo hincapié en que “estos recursos no son operados directamente por el municipio” que puede pasar a una calificación diferente en el futuro.