Madrid, 5 mar (Prensa Latina) Horas de octavos en la Champions League de Fútbol, pero también y muy especialmente del prodigio francés Kylian Mbappé, que pisa suelo español sin conocerse aún su destino.
Más allá del partido esta noche en San Sebastián del París Saint Germain (PSG) contra la Real Sociedad, la presencia de Mbappé es un atractivo adicional, sobre todo porque hace un par de semanas anunció que no seguirá con el club galo tras finalizar la presente temporada.
Jugará hoy, sin dudas, pero no se sabe si a tiempo completo y bajo las insistentes miradas y preguntas de si llegará al Real Madrid en el futuro o se decantará por un equipo de Inglaterra.
En medio de la euforia y las arengas hoy del reiterativo «sí se puede», los pronósticos de la Real Sociedad, en desventaja 0-2 ante el PSG, apunta al pesimismo por muchas razones.
El duelo en Anoeta, la casa de la Real Sociedad, llega con el bajón de las últimas semanas del conjunto que dirige Imanol Alguacil, incluida su eliminación en semifinales de la Copa del Rey por el Mallorca.
Luego, el revés estrepitoso el pasado sábado contra el Sevilla en LaLiga de España 1-3.
Si bien el PSG llega sacudido por la inestabilidad que supone el inusual tiempo de banquillo que su técnico da al explosivo Mbappé, es de todas formas un rival poderoso.
Difícilmente el preparador Luis Enrique Martínez se dará el lujo de sentar a Mbappé en Champions, una decisión que ya ha repetido en la Ligue 1 francesa en razón el anuncio del jugador de terminar contrato el 30 de junio.
Ante este panorama, esperanzador si en alguna medida afectara al PSG, la Real Sociedad quiere mostrar, al menos, que vuelve a enchufarse en la temporada e intentará dar batalla contra el club francés.
Aritz Elustondo, Ander Barrenetxea vuelven al plantel, sumándose al japonés Take Kubo, el surinamés Sheraldo Becker, y los españoles Mikel Oyarzábal, Martín Zubimendi y Brais Méndez.
Enfrente, además de Mbappé, Hakimi, Dembelé, Kolo Muani, Gonzalo Ramos y Kang-in Lee.
Este miércoles tocará el turno al Real Madrid, en situación diferente, aunque la ventaja de 1-0 en el cotejo de ida no es decisiva, tomando en cuenta que su contrincante, el Leipzig, anda subido de tono y puede darle pelea.
Los merengues llegan tensionados, después de un accidentado partido contra el Valencia el domingo que terminó con un error arbitral de bulto de Gil Manzano, lo cual les impidió el triunfo.
No obstante, más allá del cansancio, recuperan al inglés Jude Bellingham, que estaba lesionado en la ida, y con el brasileño Vinicius Junior en plena forma, y las ayudas de Brahim Díaz o del alemán Toni Kroos, sale ligeramente favorito.
Contará asimismo con otro canarinho, Rodrygo Goes, el uruguayo Fede Valverde y el incombustible volante de contención francés Eduardo Camavinga, y el escenario ideal, el estadio Santiago Bernabéu de Madrid.
Los otros dos equipos españoles en la liza, Barcelona y Atlético de Madrid, se juegan su pase a cuartos de final la próxima semana contra el Nápoles (1-1 en la ida) y el Inter (0-1), respectivamente.