París, 22 jul (Prensa Latina) El país más visitado del mundo, Francia, afronta hoy su reto más alucinante: acoger los Juegos Olímpicos y complacer a los visitantes en lo turístico y deportivo.
Por Fausto Triana, enviado especial
De cualquier forma, la respuesta puede ser variopinta y la dejo a los expertos de la industria sin chimeneas, mientras el enfoque de París 2024 tiene el enorme potencial de ser fascinante en récords, duelos individuales y colectivos.
Hay un chico sueco que no deja de hacer diabluras y sin necesidad de alardes de fuera de serie -porque lo es-, tiene temblando a su propia plusmarca mundial del salto con pértiga.
Armand Duplantis no tiene techo ni verdaderos rivales que pongan en peligro su dominio absoluto en la modalidad. Acostumbra a desvelar a los asistentes a los estadios, con sus reiterados intentos de superarse a sí mismo.
A sus 24 años, salvo un desliz en el campeonato mundial de Doha, Qatar en 2019, donde quedó segundo, desde 2018 arrasó con todos los oros en la prueba, junto con establecer y mejorar varias veces la primacía mundial de la garrocha hasta 6,24 metros, establecida en Xiamen, China, en abril pasado.
Fue su octavo registro universal en apenas cuatro años, pasando al ucraniano Sergei Bubka, que tenía el rango de mejor pertiguista de la historia, hasta la aparición de Mondo Duplantis.
-MIJAIN LOPEZ Y TEDDY RINER
Dos leyendas del deporte mundial, el luchador cubano Mijaín López y el judoca francés Teddy Riner, son fuertes candidatos a las preseas doradas en sus respectivos deportes durante la cita parisina.
Cuatro veces campeón olímpico en la máxima división de la lucha grecorromana, Mijaín, que cumplirá 42 años el próximo 20 de agosto, pudiera convertirse en el primer deportista en cosechar cinco metales áureos en los Juegos de París 2024.
Superaría así nada menos que al mítico nadador estadounidense Michael Phelps y también a los atletas norteamericanos Carl Lewis y Al Oerter, al velista danés Paul Elvstrom, y a la también luchadora japonesa Icho Kaori, todos con cuatro cetros olímpicos.
En tierras francesas donde es un ídolo, Teddy Riner, un gigante de 2,04 metros (Mijaín mide 1,96), se lanza a la aventura en busca de su cuarta dorada en lides olímpicas, con una trayectoria en la que cuenta además con 11 títulos mundiales.
Es el contrincante incómodo al que nadie desearía enfrentar en todos los pesos del judo y las posibilidades de coronarse, al igual que las de Duplantis y Mijaín son enormes en los encuentros cuatrienales de la Ciudad de las Luces.
No serán, por cierto, las únicas atracciones individuales, con finales vibrantes en la natación (Ariarne Titmus, Katie Ledecky, Caeleb Dressel y Leon Marchand), o el brillo del noruego Karsten Warholm en el atletismo junto con duelos en el triple salto muy prometedores.
La posibilidad de que un dueto de lujo, pasado y presente del tenis mundial, los españoles Rafa Nadal y Carlos Alcaraz acaricien en oro; la reaparición de la gimnasta Simone Biles; la clavadista china Quan Hongchan o el rey del sable olímpico, el húngaro Aron Szilagyi, que eslabona tres títulos seguidos (Londres 2012, Río de Janeiro 2016 y Tokio 2020).
La pregunta de París 2024: ¿turístico o deportivo?
