Reactivación y reacomodo de cinco fallas geológicas provocan enjambre de microsismos en CDMX

La reactivación y reacomodo de cinco fallas geológicas que atraviesan el subsuelo de la Ciudad de México son las responsables del enjambre de microsismos registrados el jueves en las alcaldías Miguel Hidalgo, Benito Juárez y Álvaro Obregón, desatando temor en la población.

Se trata de las fallas MixhucaSanta CatarinaSan Lorenzo TezoncoCopilco y la de Plateros-Mixcoac, cuyo reacomodo y reactivación ha provocado de enero de 2023 a la fecha 157 sismos de magnitud menor a 3.0, con epicentro en Miguel Hidalgo, Benito Juárez, Álvaro Obregón, dijo la secretaria de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, Myriam Urzúa.

Los casi 20 microsismos del jueves, que también se sintieron en zonas de las alcaldías Magdalena Contreras y Coyoacán, “estarían relacionados con la falla Plateros-Mixcoac, detectada entre los límites territoriales de las demarcaciones Benito Juárez y Álvaro Obregón”, agregó la funcionaria.

Al presentar un balance de la jornada sísmica del jueves, Myriam Urzúa dijo que “el trabajo que ha hecho la Red ECOs, del Gobierno capitalino, permitió descubrir que estas cinco fallas son las que están involucradas en estos enjambres son recientes”, y cuya actividad se sigue revisando a través de dos grupos de especialistas de los institutos de Geofísica y de Ingeniería de la UNAM.

“Son temas que se siguen estudiando, por geólogos y otros expertos científicos desde hace tiempo, y de todas maneras nosotros alentamos que se hagan nuevos estudios y nuevas investigaciones al respecto, porque son temas para ocuparse”, señaló.

Microsismos en CDMX dejan daños menores

Luego de los microsismos en la CDMX se atendieron 14 solicitudes de revisión estructural de inmuebles, en colonias como Narvate y Nápoles, de las cuales, en las primeras nueve, que ya han sido revisadas, se registraron solo daños menores, “en el revestimiento estructural”.

Myriam Urzúa precisó que la ruptura de tubería en una vivienda de la colonia Nonoalco, no estuvo asociada a los microsismos del jueves.

Este incidente se debió a “problemas de mantenimiento”, mientras que en el resto de los reportes se tienen daños en mampostería, sin riesgos estructurales, “en general, fueron daños superficiales estructurales”, afirmó la funcionaria.

Este viernes continúa la verificación en los cinco inmuebles restantes, entre ellos, un departamento en la calle de Augusto Rodin, “donde estamos pidiendo una revisión estructural del Instituto de Seguridad, para una intervención mayor”, dijo Urzúa.

En tanto, el Consejo Ciudadano para la Seguridad y la Justicia de la CDMX, “está brindado apoyo psicológico a personas que así lo requirieron” ante el temor desatado por los sismos de magnitud menor a 3.0 de este jueves, indicó la titular de la SGIRPC.

El último microsismo reportado ayer fue a las 23:57 horas, magnitud 1.2, con epicentro en la zona de la Álvaro Obregón. En las primeras horas del viernes continuaron los movimientos telúricos. El Servicio Sismológico Nacional reportó otros cuatro temblores en la CDMX.

En la conferencia de prensa en Palacio Nacional, el jefe de Gobierno de la CDMX, Martí Batres, afirmó que estos sismos, magnitud menor a 3.0, “no son nuevos en la ciudad de México”, y al ser de baja magnitud y de corta duración, “no se activa la alerta sísmica”.

Por qué no suena la alerta sísmica cuando tiembla en la CDMX

Martí Batres explicó que la alerta sísmica no suena en la CDMX porque son sismos de baja magnitud. “La alerta viene sonando cuando se trata de sismos magnitud 5.5, cuando algún sismo tiene esta magnitud es cuando podría sonar la alerta sísmica aquí en la ciudad. Además de que ocurren de manera tan rápida, que si sonara la alerta sísmica, sonaría después de ocurrido el sismo”.

Agregó que el alertamiento tiene sentido en el caso de los temblores cuyo epicentro se encuentra en las costas de Guerrero y Oaxaca, “y tarda entre 40 y 60 segundos en llegar el temblor a la ciudad. Ese dato permite a las personas moverse a un lugar seguro, a un punto de encuentro, al salir del inmueble”.

“Evidentemente que no nos gusta que haya micros, ni macros, ni medios sismos, pero ninguno de estos sismos que han ocurrido en las últimas horas en la ciudad, implica los riesgos de grandes sismos como el de 1985  o de 2017, u otros”,  concluyó.