La aplicación Litro por Litro de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), que permitía comparar precios de gasolineras cercanas, así como presentar quejas y denuncias, dejará de funcionar a partir del día de hoy.
Durante la conferencia de prensa matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, el titular de la Profeco, Iván Escalante Ruíz, informó que por un “rediseño” la aplicación estará temporalmente fuera de servicio.
“Hemos iniciado un proceso de actualización para incluir mejorar en el sistema, para ello, ya estamos trabajando con la agencia de transformación digital del Gobierno de México”, detalló.
Sin embargo, aseguró que los reportes ciudadanos son “vitales”, por lo que seguirán recibiendo quejas de probables anomalías por medio de otros canales.
¿Cómo presentar una queja o denuncia ante Profeco sobre una gasolinera?
El titular de Profeco explicó que, mientras la aplicación Litro por Litro sea reactivada, los ciudadanos pueden presentar quejas por anomalías en gasolineras por medio de los siguientes canales:
- A través de su cuenta de X @AtencionProfeco, haciendo una mención con tu problema.
- Un correo electrónico a denunciasgasolina@profeco.gob.mx
- Los números 55 5568 8722 o al 800 468 8722.
Lo único que debes hacer es describir brevemente la situación con todos los datos posibles, compartir el nombre del proveedor, producto, servicio, falta detectada, domicilio, lugar y fecha.
No es obligatorio que presentes pruebas ni que compartas tus datos personales.
En respuesta, Profeco visitará al proveedor y, en caso de verificar que está violando los derechos del consumidor, aplicará las sanciones correspondientes.
¿Por qué razones puedo denunciar a una gasolinera?
De acuerdo con la página oficial de Profeco, se pueden denunciar “actos u omisiones de un proveedor o prestador de servicios que afecta los intereses de una porción de la sociedad”. Algunos ejemplos son:
- Si un establecimiento no cuenta con las medidas de seguridad adecuadas
- Cuando un sitio no tiene sus precios exhibidos o no los respetan
- Cuando no dan los litros completos, los conocidos “litros de a litro”.
- Si la publicidad que utilizan es engañosa, entre otros.