Con una inscripción que se prevé supere las 30 mil personas, 10 mil más de las esperadas en un inicio, la Secretaría de Educación Pública (SEP) está lista para arrancar la primera edición de Prepa en Línea, cuya convocatoria cierra el próximo 31 de agosto.
El subsecretario de Educación Media Superior de la dependencia, Rodolfo Tuirán Gutiérrez, precisó que el curso propedéutico inicia el 8 de septiembre y el 5 de octubre arranca el primer módulo, lo que implica que hoy ya están capacitados, certificados y listos cerca de 850 facilitadores y 180 tutores.
En entrevista con Notimex, el funcionario federal declaró que el éxito de Prepa en Línea ha sido tal, que no se esperarán un año para lanzar la segunda convocatoria, sino que se emitirá en un plazo de tres a cuatro meses.
También se prevé que esta opción escale a tal grado que por lo menos se llegue a entre 150 y 200 mil personas, antes de que concluya la presente administración federal.
Tuirán Gutiérrez resaltó que se trata de una opción novedosa e interesante para que todos aquellos que quieran estudiar su bachillerato lo puedan hacer, pues se acomoda a diversas necesidades y requerimientos y da enormes facilidades y ventajas para quienes trabajan o tienen otras responsabilidades, incluso la crianza de los hijos.
Y es que el servicio se proporciona las 24 horas del día, por lo que quien se decide por esta opción –y accede a la plataforma a través de una computadora, teléfono celular, tableta electrónica o cualquier otro mecanismo que tenga conectividad con Internet-, lo hace en el momento en que así tenga disposición.
El subsecretario de Educación Media Superior de la SEP estableció que en esta opción, de las múltiples que existen y que se hacen enormes esfuerzos para que se multipliquen, no se requiere que se acceda a un conjunto de contenidos solamente, sino que hay facilitadores que están al servicio de los estudiantes, si así ellos lo solicitan.
Existen dos agentes adicionales que garantizan que el alumno pueda recibir apoyo y seguimiento cuando lo necesite: un tutor, que atiende a cerca de 200 estudiantes, y un supervisor que garantiza que esa relación con docentes y tutores se realice con calidad.
“Un supervisor checa en núcleos de mil estudiantes cómo están operando los 20 facilitadores y los cinco tutores que corresponden a esa célula en particular. Entonces, la primera característica relevante es su mediación docente para garantizar que el servicio no derive en desaliento o desencanto de los jóvenes, sino que se haga valer su persistencia para avanzar en los módulos”, señaló.
Y es que Prepa en Línea consta de 23 módulos que puede cursar, adicionalmente con el propedéutico, en dos años cuatro meses. La duración promedio de cada módulo es de alrededor de un mes, aunque hay separación temporal entre uno y otro.
Otras ventajas adicionales incluyen el hecho de que el estudiante no está sólo, sino lo acompaña no únicamente un docente, facilitadores y supervisores, sino sus propios compañeros de estudio y puede comunicarse con ellos de diversas maneras: aulas virtuales o mecanismos de interacción de uno a otro.
“Con ello estamos garantizando la existencia de una plataforma educativa muy poderosa, fácilmente accesible desde cualquiera de los mecanismos mencionados, de manera tal que la relación con el servicio pueda ser ágil, constructivo, muy interactivo y además utilice las redes sociales para que ayuden a facilitar los procesos de aprendizaje de los estudiantes”, resaltó.
Enfatizó que “Prepa en línea es un instrumento que responde a la diversidad de opciones; no se trata de que limitemos las opciones para ningún tipo de persona. Esta es una que, para todos aquellos que deseen cursar su prepa, bajo estas condiciones, lo puedan hacer”.
Tuirán Gutiérrez destacó que “difícilmente vamos a dejar de reconocer que esta es una opción sugerente, atractiva e interesante”, sobre todo si no sólo se ofrece la tecnología sino el acompañamiento docente y el cuidado y la atención que corresponde al apoyo que se le puede otorgar a los estudiantes.
“Hemos cuidado mucho esa parte y creemos que los docentes, uno de sus desafíos más considerables, es justamente garantizar que el estudiante reciba el apoyo que corresponda y que gracias a eso, a la calidad del trabajo de facilitadores y tutores, sea posible retener al mayor número de estudiantes posibles”, concluyó.