CARTA A MI NIETO QUE AÚN NO NACE

Por Manelick de la Parra Vargas

LUCIANO
 
Vives en un mar lleno de música,
de olas internas y murmullos lejanos.
Oyes voces que te esperan
del otro lado del mundo.
Dejarás pronto tu cálida cueva.
Tu río privado.
Tu cascada detenida en el tiempo.
Y tu corazón palpitará mil veces
en contrapunto al corazón de tu madre.
Oyes, sientes, imaginas,
en ese estado tan puro,
en esa agua esencial que te cobija.
Y ya vienes a respirar la vida.
Ya vienes al beso de tu madre
y al calor de sus brazos.
Y encontrarás  a un padre
sorprendido igual que tu.
Y también me encontrarás a mi, tu abuelo,
que te vengo esperando toda mi larga vida
pues eres el último eslabón de una cadena de cariño, que viene de hace  muchos años.
Te esperan tantas cosas hermosas.
Quizá la más, es ser niño y
vivir tu infancia intensamente  que es muy corta
Y se  le extraña más.
  
Luego, el paso constante del  agua,
ese rio que creemos que nunca desembocará
en ningún lado, que llamamos Vida.
Crearás felicidad porque es la mejor manera de navegar y algún día, dentro de muchos años, escribirás una carta a tu nieto quizá con las mismas palabras que éstas, pero no te preocupes, ya se te habrán olvidado las mías y las encontrarás con la misma frescura con la que las encuentro yo.
 
Bienvenido a la aventura de la Vida
envuelto en el algodón que da el Amor.
 
Tu abuelo.
 
Manelick
 
Octubre 2015

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