México, 26 ago (PL) A 100 días del asesinato del escritor y periodista Javier Valdez, las autoridades mexicanas continúan sin ofrecer avances en las investigaciones, persiste la impunidad, denuncia hoy el diario La Jornada.
Valdez, corresponsal del diario capitalino y de gran experiencia en narrar la violencia del narcotráfico en el estado de Sinaloa, fue ultimado el 14 de mayo por bandidos armados al salir del semanario Ríodoce, del cual era fundador en Culiacán.
Refiere la fuente que la Procuraduría General de la República (PGR) no considera ese hecho como delito de lesa humanidad o violación grave a los derechos humanos, lo ubica como una infracción común en la capeta de delitos diversos.
Mientras en Guerrero trabajadores de la prensas protestaron la víspera, ante las instalaciones de la PGR por las agresiones que desde el pasado domingo sufrieron los reporteros de esta entidad en los municipios de Tlapa, Taxco, Iguala y Chilpancingo.
Alina Fernández, redactora, reveló dos incidentes graves cometidos contra Antonia Ramírez y Alejandro Guerrero, corresponsales de El Sur en las regiones Montaña y Norte, por escoltas del gobernador Héctor Astudillo.
El pasado jueves, precisó, Guerrero fue atropellado (intencionalmente) por desconocidos y está internado en un hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social.
También han sido violentados por policías Claudio Viveros, de El Sur, y Raymundo Ruiz, de La Jornada en Guerrero, ambos radicados en Taxco.
Otros medios nacionales y locales también han denunciado que sus redactores han recibido amenazas de muertes por publicar el entramado del narcotráfico en distintas partes del país.
En lo que va de año han sido asesinados otros nueve comunicadores mexicanos, así como un camarógrafo hondureño que buscaba refugio en México, tras ser amenazado de muerte en su país.
Según los analistas, México es uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo con más de 100 reporteros asesinados desde el 2000, y más del 90 por ciento de estos crímenes siguen impunes.