Estadísticas del Sistema Nacional de Seguridad Pública indican que el número de homicidios dolosos aumentó en 27 entidades con respecto a 2016.
De los 15 estados que gobierna el PRI en 12 crecieron los asesinatos intencionales.
También subió en diez de los once estados blanquiazules, con énfasis en Nayarit y Baja California, así como en cuatro de las cinco entidades perredistas.
Los datos oficiales reflejan que la violencia también aumentó en Nuevo León, el único estado encabezado por un independiente.