México, 25 jun (PL) El mercado negro del gas licuado de petróleo (LP), con el que cocinan millones de familias mexicanas se expande hoy y tiene un valor estimado de cinco mil millones de pesos al año (más de 260 millones de dólares).
Empresarios expendedores de gas LP, vendedores y analistas en seguridad coinciden en que en los últimos dos años, en especial desde 2017, ha habido un incremento en el mercado negro de este energético.
Tal período coincide con la liberalización del mercado y los precios, en vigor desde inicios de 2017. Desde entonces los mexicanos pagan cada mes más por las bombonas de gas doméstico.
La sofisticación del hurto de ese combustible es tal que las pipas son clonadas, lo cual hace muy difícil detectar una legal de otra con gas robado.
Rubén Salazar, director general de Etellekt, firma dedicada al análisis de seguridad y riesgo, comentó que desde 2015 vienen alertando sobre la capacidad de los ladrones del gas LP para extraer de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Coincidió que ese mercado negro se ha vuelto más prolífico desde el año pasado cuando se liberó el precio del producto, y comenzó a aumentar hasta alcanzar un incremento de 48 por ciento frente al 2016, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi).
Asegura que de acuerdo a información de Pemex, en 2015 la cantidad de GLP que se perdía en sus ductos era de dos mil 400 barriles diarios. Al cierre del año pasado esa cifra aumentó a seis mil 600 barriles por día.
Se expande en México mercado negro del gas licuado doméstico
