Al adelantar que habrá un nuevo plan fiscal, Alfonso Romo, propuesto como coordinador de la Oficina de la Presidencia de la República en el próximo gobierno, garantizó que la nueva administración trabajará de la mano con el sector empresarial, pues el nuevo motor de la economía será la inversión privada, nacional y extranjera.
“No estamos hablando de volver al pasado (ni de hacer) nada diferente, sino aprovechar lo que ya tenemos para crear más valor, más riqueza”, dijo durante el Foro Estrategia Banorte 2018, Banorte, un Aliado del Futuro de México, donde en posterior entrevista dejó claro que no habrá más impuestos ni alza a los actuales.
Romo Garza indicó que en breve se darán a conocer más detalles de lo que será el nuevo plan fiscal, y dijo que también se buscará “quitar el efectivo de la economía” para poder combatir la corrupción y sumar a mil millones de personas a la economía formal.
“Ni nuevo impuestos, ni más impuestos ni nada. Hay un proyecto muy interesante que no les puedo platicar ahorita (…), se los voy a platicar en tres semanas”, comentó al preguntarle sobre el nuevo plan fiscal.
El empresario regio, quien consideró que la “luna de miel” entre el próximo gobierno y el sector se empresarial pasó a un “matrimonio católico para siempre”, resaltó la importancia de crear un ambiente de confianza, lo cual se traducirá en una mayor inversión y crecimiento para el país.
“El reto de esta administración es que (…) le demos toda la confianza de que México se va a convertir en un ‘paraíso de la inversión’, y para que se convierta en eso debe haber Estado de derecho y mucha seguridad”, enfatizó.
Expuso que la administración federal entrante continuará sus reuniones con los empresarios del país para escucharlos, conocer sus necesidades, pues lo que se busca es ir “cerrando filas entre el gobierno que entra y el sector privado”.
Al abordar el tema Visión del Nuevo Gobierno, hizo énfasis en que “estamos trabajando con todos (los empresarios). No hemos ido con todos, pero vamos a ir con todos”.
En el evento encabezado por Carlos Hank González, presidente del Grupo Banorte, recordó que el cambio de gobierno viene con un lenguaje más social, más dirigido a los olvidados.
Recordó la instrucción que recibió del otrora candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, de “sentar a todos los Méxicos”; “lo ayudé a hacer el proyecto de nación, como ustedes saben, donde me dijo: sienta a todos los Méxicos, sienta a todos los sectores porque el país tiene que unirse y tenemos que aprender a sentarnos y a dialogar”.
Refirió que tras su encuentro con integrantes de Morena, al cual “yo no conocía ni soy parte del partido”, concluyó que “ni ellos eran tan rijosos como creíamos ni nosotros éramos los empresarios egoístas que lo único que nos importaba era la riqueza personal”.
Sobre la influencia que tendrá al formar parte del “círculo cercano” del ahora presidente electo de México, el también ingeniero agrónomo por el Tecnológico de Monterrey se sinceró al expresar que a “esto de la política no le entiendo tanto”.
Sin embargo, consideró que ha habido una gran alineación de intereses, “participo en todas las reuniones. Doy mi opinión entre muchas y nos oyen a todos (…) Estoy aprendiendo a convivir. Hoy por hoy, el plan, la dirección a dónde va el país, soy parte del equipo de él. Comulgo con ese plan”.
En un hotel ubicado en Polanco, Alfonso Romo dijo que lo importante es que el rumbo por el que se busca que camine el país sea el correcto; “si el 10 por ciento, 15 por ciento no me gusta, no me importa. Lo que importa es que el rumbo esté correcto”.
Por ello, “creo que si esto sigue es porque nos están escuchando a todos y seguiré el tiempo que sea necesario y tampoco si no es necesario, me pedirán que me regrese a Monterrey”, concluyó.