A principios de este año, el Gobierno de México aceptó 25.5 millones de dólares de la petrolera BP que le quita toda responsabilidad por contaminar las aguas mexicanas en el mayor derrame de crudo ocurrido en abril de 2010.
Este pago fue parte de un acuerdo confidencial para desechar una demanda relacionada con el desastre cuando una plataforma de BP explotó en el Golfo de México, denunció este viernes la organización PODER.
Afectaciones
La petrolera gastó, al menos, 60 mil millones de dólares en torno al desastre y más de 10 millones fueron hacia los pescadores y negocios estadounidenses afectados, de los cuales, ni un sólo centavo ha llegado a los mexicanos afectados.