Rechazan proyecto que permitiría sacar militares chilenos a la calle

Santiago de Chile, 21 ene (Prensa Latina) Amplias críticas despierta hoy la aprobación por el Senado de Chile de un proyecto impulsado por el gobierno que permitiría participar a las Fuerzas Armadas en el resguardo a la «infraestructura crítica» del país.


El texto, presentado a finales de noviembre por el presidente Sebastián Piñera, fue aprobado la víspera por 28 votos a favor, 12 en contra y una abstención, en lo cual, además del apoyo en bloque de los senadores de derecha, también se sumaron casi todos los de la Democracia Cristiana y el Partido por la Democracia, ambos en la oposición.


En contra votaron los senadores del Partido Socialista, Partido Progresista, Revolución Democrática e independientes.


El proyecto deberá ser analizado ahora en la Cámara de diputados, donde se prevé un fuerte debate, pues de salir adelante esta iniciativa, el Presidente podría disponer del concurso de los uniformados en el cuidado de lo que se considera «infraestructura crítica» sin necesidad de imponer el estado de excepción previsto en la Constitución.


Esta medida había sido anunciada a finales de noviembre último por el presidente Sebastián Piñera, quien en ese momento dijo que lo que se buscaba era liberar a un número importante de carabineros para dedicarlos a proteger el orden público.


Sin embargo, en amplios sectores esto es interpretado como un peligroso intento de sacar a los militares nuevamente a las calles, pero sin tener que recurrir a medidas drásticas como el estado de excepción, tal como ocurrió a los pocos días del estallido social del 18 de octubre.


El fallo del Senado fue alabado por Piñera, el ministro del Interior, Gonzalo Blumel, y el titular de Defensa, Alberto Espina, quienes lo consideraron importante para mantener el orden público y resguardar la seguridad de los ciudadanos.


Sin embargo, este martes el tema se convirtió en tendencia en las redes sociales donde una gran mayoría de ciudadanos lo califica como una vía para legalizar la violación de derechos humanos y aumentar la represión contra el movimiento social.


Muchos advierten además que el ejército debe limitarse a salvaguardar la soberanía del país y no a atender el orden interno, que corresponde a las fuerzas policiales, mientras para otros, con decisiones de ese tipo los políticos solo ganan un mayor rechazo de la población.


Aunque no faltan quienes piden que el ejército salga de nuevo a las calles para «mantener el orden» como hizo en época de la dictadura de Augusto Pinochet.


Entre las fuerzas de oposición, el presidente de la Cámara de Diputados, Iván Flores, consideró que se trata de «un mal proyecto que está en la línea equivocada y solo va a generar más tensión» cuando el país necesita avanzar hacia un verdadero pacto social y responder a las demandas ciudadanas.


Por su parte, la diputada comunista Camila Vallejo calificó de increíble «el nivel de entreguismo de un sector de la oposición, pues le da al presidente poder para sacar a los militares a las calles y al mismo tiempo le piden prudencia.


Para la también diputada comunista Karol Cariola, Piñera no es merecedor de más facultades en cuanto al uso de la fuerza, sino que, al contrario, por el bien y la seguridad del país el mandatario lo que necesita es más control del parlamento.


Por su parte, el diputado Gabriel Bóric anunció que cuando sea analizado el texto en la Cámara baja votará en contra porque en la práctica se crea un nuevo tipo de estado de excepción con alto nivel de arbitrariedad, y advirtió que no se necesitan más formas de represión sino enfrentar las causas profundas del malestar social.