París, 22 feb (Prensa Latina) Decenas de personas tomaron hoy aquí la céntrica Plaza de Chatelet para rechazar el plan promovido por el presidente estadounidense, Donald Trump, como solución al conflicto en Palestina y defendieron el derecho de ese pueblo a la autodeterminación.
Integrantes de varias organizaciones francesas y de extranjeros residentes protestaron contra la iniciativa norteamericana, la cual consideraron una manera de legalizar la ocupación, la colonización y los crímenes de Israel.
Banderas palestinas, consignas de solidaridad, música, dibujos y grandes pancartas colmaron buena parte de la plaza parisina ubicada muy cerca del río Sena, donde activistas repartieron volantes y se acercaron a transeúntes para explicarles lo que ocurre en los territorios ocupados y la intención de Trump de perpetuar allí las violaciones de los derechos humanos.
Entre los reclamos de los manifestantes en Chatelet estuvieron el respeto a la soberanía del ocupado pueblo, la libertad de los palestinos presos por defender sus derechos, entre ellos menores de edad, el cese de los crímenes y el reconocimiento de Palestina como un Estado sin concesiones.
También demandaron un boicot y medidas internacionales que obliguen a Israel a detener la construcción de asentamientos en Cisjordania y poner fin a más de seis décadas de ocupación.
Trump presentó el 28 de enero su plan, acompañado por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, calificándolo de «una oportunidad histórica», propuesta que encontró una fuerte condena de las autoridades y el pueblo palestinos.
Estamos aquí personas de diversos sectores para decirle no a este plan y al intento de liquidar la causa palestina, comentó a Prensa Latina Abeer Hamad, presidenta de la Asociación de Palestinos en la Isla de Francia.
De acuerdo con Hamad, son muchas las organizaciones que participaron en la movilización sabatina, entre ellas la Asociación Francia-Palestina Solidaridad, el Foro Palestino Ciudadanía, la Asociación de Marroquíes en Francia y la Unión Judío Francesa por la Paz, además de jóvenes, comunistas y universitarios.
«Hace mucho tiempo hay un proyecto para confiscar tierras de un pueblo inocente que es desplazado, en un conflicto que no es religioso, sino político, porque el enemigo no es el judaísmo ni el pueblo judío, y sí el Estado de Israel y el sionismo», subrayó.