No fue hace mucho cuando Gerardo Flores Escobedo -vocero del CEN Democrático- exigía una indagación de la procedencia de la fortuna de Napoleón Gómez Urrutia y su familia, en donde solicitó a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) que abriera una carpeta de investigación. Dicha dependencia a la fecha no se ha pronunciado al respecto y los mexicanos siguen sin conocer la procedencia licita de su fortuna, valuada –solamente en propiedades- en más de 150 millones de pesos.
Propiedades de las cuales se tiene constancia en los registros públicos, pues hay que recordar que:
Desde el inicio de su liderazgo en el Sindicato Minero en el año 2002, Napito estuvo envuelto en polémica, ya que el cargo le fue heredado de su padre Napoleón Gómez Sada –líder del sindicato minero durante 40 años-. Aún cuando Napito no estaba registrado como trabajador en ninguna empresa minera y tampoco era miembro activo de sección sindical alguna. Pudo adquirir una casa situada en la exclusiva zona de Lomas de Chapultepec de la Ciudad de México, con valor de un millón 300 mil dólares.
Durante su exilio autoimpuesto en Canadá al ser destituido como secretariado general del Sindicato Minero tras el accidente de Pasta de Conchos –donde perdieron la vida 65 mineros- la familia compró un departamento en aquel país con valor de 26 millones de pesos.
En 2015 aún viviendo en Canadá, puso a la venta una casa en la colonia Florida en la Ciudad de México, valuada en 30 millones de pesos. Sin embargo, esta fue vendida a una de las empresas familiares con un valor muchísimo menor del tasado, siendo el precio final de 2 millones 800 mil pesos.
Tiene además una residencia en Tepoztlán Morelos, con un precio de 60 millones de pesos.
Aunado a los bienes inmuebles, hay que recordar los 31 autos de lujo que presume poseer su hijo Napoleón Gómez Casso, mismo que adquirió dos empresas después de que su padre fuera nombrado senador plurinominal por Morena y formara parte de la comisión de Minería y Energía, empresas, que –casualmente- se dedican al rubro minero y energético donde su padre tiene injerencia.
A la fecha el senador sigue sin aclarar la procedencia de su fortuna, limitándose a decir que todo forma parte de un ataque personal de sus enemigos políticos y empresariales que han buscado por años dañar su imagen. Estas declaraciones dejan con mas dudas que respuestas a los mexicanos y a los integrantes del Sindicato Minero.
Napoleón es senador de día y empresario millonario… también
