El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard participó en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y propuso destinar los recursos de armamento nuclear a la investigación y la salud.
El canciller señaló que sería bueno que los recursos destinados a ese tipo de armas se inviertan en la salud y la investigación de la nueva cepa de Covid-19.
Una gran cantidad de recursos que son necesarios para atender prioridades de salud se invierten en armamentismo y desarrollo de armas nucleares.
“A mayor proliferación de este tipo de armamento, menores recursos hay en el mundo disponibles para hacer frente a la desigualdad que tenemos en el acceso a servicios de salud”, recalcó.
Reiteró la importancia de la investigación respecto a nuevos virus, mutaciones, microorganismos, pues en el mundo se invierte más en armamento que en investigación.
Ebrard destacó que los países que desarrollan este tipo de armamento ponen en peligro a su sociedad, vecinos y otras regiones del mundo.
Recordó que en México desde el tratado de Tlatelolco se promovió construir una región en América Latina ajena al armamento, ensayos y desarrollo de armas nucleares.
La ONU señaló que “hoy en día, el riesgo de utilizar armas nucleares –de manera intencional, por accidente o por error de cálculo– es más alto que nunca desde los días más oscuros de la Guerra Fría”.
Cabe señalar que el diálogo respecto al asunto de armas nucleares tiene dos principales interlocutores: Estados Unidos y Rusia, quienes poseen el 90% de armas del mundo.