México, 4 nov (Prensa Latina) El futuro de la aerolínea mexicana Interjet pende de un hilo por malas decisiones administrativas y financieras, según un análisis divulgado hoy por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
La entidad de protección a los consumidores reaccionó así a las quejas de viajeros por la suspensión de vuelos durante el fin de semana y arbitrariedades en perjuicio de quienes habían pagado o reservado pasajes que ahora no son seguros.
Profeco indica que los responsables de la aerolínea se estrellaron con la crisis ocasionada por la pandemia del coronavirus.
El procurador Ricardo Shieffeld infirmó ya adelantaron que las deudas de la compañía son prácticamente impagables y se emitirá una alerta al consumidor para que los usuarios dejen de viajar en esas aeronaves.
Los inversionistas, por su parte, se niegan a proveer fondos a Grupo Alemán, principal dueño, hasta que los bienes de la compañía dejen de estar en peligro de embargo, lo cual hoy resulta más inviable que nunca.
Añaden que los 150 millones de dólares que los socios Carlos Cabal Peniche y Alejandro del Valle aportaron para su capitalización no han tocado siquiera las arcas de la aerolínea, debido a que aún no se liquida la deuda de casi tres mil millones de pesos (140 millones de dólares) que se mantiene con el sistema tributario.
A ello se suman otros mil 196 millones de pesos (57 millones de dólares) que la compañía debe a Aeropuertos y Servicios Auxiliares por el pago de turbosina, así como tres quincenas que se adeudan a sus más de cinco mil trabajadores.
La flota de Interjet también muestra una importante merma. El año pasado contaba con 65 aeronaves y este año se redujo a 25, de las cuales 21 no han podido despegar en las últimas tres semanas.