México, 21 mar (Prensa Latina) El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) que inaugura hoy el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, impresiona por su tamaño, modernidad, belleza y operatividad, pero también por ser un centro arqueológico de primera categoría.
Esto se debe a los cementerios de mamut que fueron encontrados en las excavaciones, uno de los más grandes e importantes del mundo hasta ahora hallados, lo cual permitió que, junto con las obras, se construyera un museo único en su clase en el país.
La nueva instalación es parte del corredor cultural conformado por varios museos, y este en específico se le denomina Museo Paleontológico de Santa Lucía Quinametzin, o como ya se le dice popularmente, Museo del Mamut.
Está entre las primeras obras terminadas en el AIFA, el 10 de febrero de este año, y alberga los hallazgos paleontológicos durante la construcción de la terminal.
De acuerdo con el Ayuntamiento de Zumpango, encontraron además restos de otros animales de aquellas lejanas épocas como perezosos, caballos, camellos y tigre dientes de sable.
El museo está compuesto por seis salas. En la primera el tema es la formación de la cuenca del Valle de México; mientras que la segunda está dedicada a la biología del mamut, origen, evolución, anatomía y características. La tercera versa acerca de la biodiversidad que existía hace miles de años, la interacción hombre-mamut, y las demás hacen referencias a las antiguas poblaciones de México y América, las posibles causas de la extinción de los animales que vivían en la zona y por último, los trabajos paleontológicos realizados en este lugar.
A ello se suma un área de exposición al aire libre, el Jardín temático Santa Lucía, un centro de investigación, una cafetería y un área lúdica.
Se exhibe un esqueleto de mamut hallado con el 95 por ciento de su estructura completa que data de hace más de 10 mil años, y está ubicado en el vestíbulo del museo, cuya edificación ocupa siete mil 328 metros cuadrados del corredor cultural.
Dicha osamenta pertenece al periodo pleistoceno, es una hembra que quedó atrapada en el fango de lo que era parte del lago del Valle de México. Su estado fósil permitió la conservación por varios siglos para ahora dar la bienvenida a un viaje por el pasado paleontológico del país, dicen los paleontólogos.
En poco más de dos años de exploración se encontraron restos de más de 700 mamuts, además de camellos, antílopes, aves y peces que datan de al menos 14 mil años.
Los hallazgos están clasificados en tres contextos de acuerdo con el área en que se encontraron: el primero se ubica en la parte norte del polígono de construcción.
El segundo en la media este y se caracteriza por una fauna del proboscídeo en el sedimento. Finalmente, el tercero son unidades en la zona centro sur de huesos aislados en estratos arenosos.
También hallaron restos de mampostería de una vivienda, pisos de tres casas prehispánicas, 21 osamentas humanas con ofrendas, una escultura de piedra tallada, 18 piezas de cerámica completas y 30 semicompletas, entre otras muchas piezas.
jha/lma