Chilpancingo, Guerrero vive éxodo de empresarios ante violencia que se triplicó.
Adrián Alarcón Ríos, presidente de la Coparmex cuyo negocio familiar comenzó hace 47 años, dice que todo ha cambiado de tres años para acá.
Explica que no sólo han bajado las ventas, que en su caso y en el de los agremiados a la Cámara Nacional del Comercio han disminuido 30 por ciento y el único negocio que ha crecido hasta mil 500 por ciento, asegura, es el de la muerte: funerarias, capillas, pago a pastores y sacerdotes.
Por tanto, algunos empresarios se han ido a Morelos, Ciudad de México, Puebla y Guanajuato.
Fuente: Notisistema