Datos que han circulado en las últimas horas sobre la vida y obra de la joven Brisa “N”, abatida la noche del lunes en Palma Sola, tras un enfrentamiento con autoridades policiales, indican que podría estar vinculada a la desaparición de los cinco jóvenes que fueron privados de su libertad en julio pasado en Emiliano Zapata.
El pasado 2 de julio, en el poblado de Palo Gacho, fueron llevados por la fuerza cinco jóvenes. Cedrik Abdiel Ramírez Aguilar, de 19 años, Iván Aurelio Aguilar Villa, de 26 años, Iván Sosa Lagunes, de 32 años; Mario Figueroa Domínguez, de 32 años de edad y Marco Javier Reyes de 30 años.
Todas las versiones que han salido indican que los chicos se encontraban refrescando la garganta y comiendo mariscos en el bar “Michelukas” y cerca de pagar la cuenta y marcharse aparecieron hombres armados que los sometieron y los llevaron contra su voluntad.
Desde entonces ha sido un calvario para las familias de los ausentes el poco lento y avance de la Fiscalía General del Estado (FGE) para encontrar a sus hijos.
Suman meses y días sin que las autoridades les den datos precisos sobre el destino de los chicos; menos, información sobre quién pudo haber perpetrado tal atentado.
Hasta ahora se desconoce la ubicación de los jóvenes, igualmente no se cuentan con indicios que hubiesen sido secuestrados con fines extorsivos.
Pero la detención de Brisas del Mar “N” y dos hombres, supuestamente ligados a una célula del crimen organizado bajo las siglas del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el pasado 6 de septiembre en el municipio de La Antigua abrió un indicio sobre lo que pasó con esos jóvenes.
Una fuente cercana al caso, a la que se tuvo acceso, indicó que en las horas posteriores a la desaparición, un allegado de los chicos se percató que el número de Cedrik Abdiel Ramírez Aguilar aparecía en línea en la aplicación WhatsApp, por lo que le manda mensaje para saber dónde se encontraban y que había pasado.
Pero la respuesta resultó escalofriante y estremecerdora: “A esos ya no los busquen, esos ya…” y junto a esas palabras enviaron unos emojis de calaveras, dando a entender que el destino de los jóvenes había parecido fatal.
Pero la persona que contesta esos mensajes comete un error, al tomarse una foto con el dispositivo y subirla al perfil de WhatsApp de la víctima de desaparición. Se trata de una imagen en la que sólo se mira la mitad del rostro y el tórax, pero se notan importantes y marcados rasgos de su fisonomía. Era una mujer.
A pesar de que sólo es una foto de los labios hacia abajo, en la misma se miran lunares y una cadena que son similares a los que se aprecian en la imagen oficial dada a conocer por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) cuando anunció la detención de Brisas del Mar “N” dentro del caso resaltan un cadena de acero monel que pende de su cuello.
La misma cadena plateada se mira en la foto que subieron al perfil de la víctima, tal vez a manera de burla, pues aunque no se nota la cara completa se denota una leve sonrisa, la cual desaparece en el rostro desencajado que fue boletinado por la SSP como parte de sus acciones contra la delincuencia.
Igualmente, otro rasgo que indica que Brisa del Mar “N” está relacionada al destino final de los jóvenes desaparecidos, son los que se miran regados en su hombro, labios y cuello.
Incluso, la blusa en las dos imágenes es color negra y es altamente probable que se trate de la misma prenda el día de su detención con la foto multicitada sobre el caso de los cinco de Palo Gacho.
Toda esta información fue aportada a la Fiscalía General del Estado (FGE) tan pronto se supo de la detención de Brisas del Mar “N”, no obstante, el organismo autónomo no ha mostrado interés en estos detalles.
La joven Brisas del Mar “N” recuperó su libertad de manera inmediata cuando fue presentada a un Juez de Pacho Viejo y se alegó que la carpeta sobre su detención, contaba con deficiencias. Ella y otro de sus coacusados fueron dejados en libertad, uno sí permanece preso.
ES ABATIDA
La noche del lunes, elementos de la Fuerza Civil patrullaban calles de Palma Sola, en el municipio de Alto Lucero, cuando fueron agredidos desde una casa en la calle Pedro de Alvarado, esquina calle Cristo Rey.
Al ser asegurado el inmueble, que cuenta con las características de una casa de seguridad, los oficiales localizaron armas de fuego cortas y largas, así como chalecos tácticos, dos vehículos y un invernadero donde había un plantío de mariguana.
En el mismo inmueble se da una segunda agresión y es cuando cae abatida Brisas del Mar “N” y dos sujetos más que hasta ahora no han sido identificados.
Datos de militar a los que se tuvo acceso indican que tras la detención de Brisas del Mar “N”, las autoridades obtuvieron información de relevancia que ayudó a detener otro trío de presuntos delincuentes cerca de Xalapa quienes se dirigían cometer ilícitos para dañar a la sociedad.
Igualmente ella era investigada por el homicidio de un hombre en el poblado de “El Faisán”, ocurrido el cinco de septiembre pasado, y que posiblemente estaba vinculada a una peligrosa célula del CJNG asentada en Alto Lucero.
Debe asentarse que previamente a la captura de Brisas del Mar “N” circularon noticias en medios de comunicación donde se informaba sobre violaciones a los derechos humanos de una vecina de ciudad Cardel, en el municipio de La Antigua.
Sin dar sus nombres, familiares denuncian que había sido sacada por la fuerza de su casa por elementos de la Fuerza Civil e incomunicada, aunque no indican si se trata de la misma persona.