Londres, 30 oct (Prensa Latina) La consultora de negocios Allyson Stewart-Allen aseguró hoy aquí que Estados Unidos lleva las riendas en las actuales negociaciones comerciales con el Reino Unido para firmar un acuerdo de libre comercio post-Brexit.
Creo que Estados Unidos mantiene una posición negociadora fuerte porque sabe que el Reino Unido está desesperado por firmar el pacto, en momentos en que no hay nada claro sobre las conversaciones entre Londres y la Unión Europea, afirmó la analista durante una rueda de prensa online con corresponsales extranjeros.
Según Steward-Allen, una norteamericana que lleva más de 30 años asentada en Europa, esta percepción hace que la parte estadounidense se sienta «envalentonada» y seguramente presionará para poner sobre la mesa temas controvertidos como el pollo clorado, las exportaciones de carne vacuna, el sistema de salud pública y la propiedad intelectual.
El Reino Unido necesita desesperadamente a Estados Unidos como socio comercial, por lo que si yo fuera la secretaria de Comercio Internacional Liz Truss, quien es la que lleva las negociaciones en nombre del gobierno británico, o alguien de su entorno, estaría extremadamente nerviosa, acotó.
Tras abandonar la Unión Europea el 31 de enero pasado, el Reino Unido comenzó a negociar tratados de libre comercio con Estados Unidos, Australia, Japón, el propio bloque europeo y varios países más.
Cualquier pacto que surja de esas negociaciones, como el ya firmado con Japón días atrás, entraría en vigor una vez concluya el periodo de transición post-Brexit acordado por Londres y Bruselas el 31 de diciembre próximo.
Interrogada sobre el impacto que tendría el resultado de las próximas elecciones presidenciales en las tratativas que mantienen los gobiernos británico y norteamericano, la analista aseguró que el próximo mandatario de Estados Unidos tendrá otras prioridades.
Si gana Donald Trump, tendrá que ocuparse primero de la Covid-19, y de cumplir las promesas que hizo sobre generar fuentes de trabajo, además de atender sus deudas financieras personales, pero si es Joe Biden, entonces este tendrá que lidiar con un país profundamente dividido, por lo que tendrá que concentrarse en unirlo.
Es obvio que el Reino Unido es un aliado estratégico de Estados Unidos desde el punto de vista militar y defensivo, pero en términos de exportaciones, no es tan imprescindible como sería el caso de China o de la propia Unión Europea, remarcó.