El 7 y 8 de octubre de 2014, Omar García Harfuch participó en las primeras reuniones entre autoridades federales y estatales por el caso Ayotzinapa, revelaron documentos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en Iguala, obtenidos por El País.
El mes pasado, un testigo clave en la investigación de la desaparición de los 43 normalistas acusó que Harfuch recibía mensualmente 200 mil dólares del cártel Guerreros Unidos como encargado de la Policía Federal en Guerrero. Además, se le acusó que cuando era coordinador de Seguridad Regional de la Policía Federal en Guerrero, participó en la reunión en la que entre funcionarios se fraguó la llamada “verdad histórica”.
El hoy secretario de Seguridad de la Ciudad de México rechazó la “versión absurda” de haber participado en dicha reunión y pidió que las investigaciones se enfocaran en “quien hizo daño a los jóvenes”, que según el gobierno fueron asesinados.
Anteriormente, el jefe policiaco ha dicho que cuando ocurrió el ataque contra los estudiantes normalistas, él había dejado Guerrero y estaba en Michoacán.
Sin embargo, los documentos en poder del medio español, son dos minutas de “juntas de autoridades” mantenidas en el 27 Batallón de Infantería, en Iguala.
En aquel momento, la extinta Procuraduría General de la República (PGR) acababa de asumir la investigación por el ataque contra los estudiantes normalistas y la desaparición de 43 de ellos, ocurrida la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre en el municipio.
Tomás Zerón, director en la época de la Agencia de Investigación Criminal de la Procuraduría (AIC), fue quien dirigió las reuniones. Actualmente, Zerón está prófugo de la justicia mexicana, acusado de delitos de tortura y desaparición forzada. Mientras que el ex procurador Jesús Murillo Karam fue aprehendido hace un par de semanas en su casa de la Ciudad de México.
El País señala que “la presencia de García Harfuch en Guerrero antes, durante o después del ataque, el nivel de conocimiento que tuvo de lo ocurrido y su relación con la actuación de los que eran o habían sido sus subordinados en Iguala son cuestiones todavía por aclarar. Actualmente, tres de los policías federales que estaban de servicio en el municipio durante el ataque están en prisión“
“Otra cuestión sin aclarar es la posible participación de García Harfuch en más reuniones en Iguala, antes o después de las del 7 y el 8 de octubre de 2014. En la reunión del día 8, por ejemplo, Zerón cita a los participantes a una nueva junta dos días más tarde, a la que, dice, acudirá también el procurador general entonces, Jesús Murillo Karam”, apunta el medio.
El diario recuerda que tras la detención del presunto líder de Guerreros Unidos, Sidronio Casarrubias, luego de que se celebraran aquellas reuniones, las autoridades le hallaron una libreta, donde aparecían nombres y números de teléfono de funcionarios; entre los contactos de Casarrubias figuraba García Harfuch.
A la referida “junta de autoridades” del 7 de octubre, que inició a las 10.15 de la mañana, acudieron en total 18 personas. Además de Zerón y Harfuch, estaban el general Alejandro Saavedra, jefe del Ejército en Guerrero en la época, el procurador de justicia del Estado, Iñaki Blanco, el jefe de la Unidad Antisecuestros de la PGR, Gualberto Ramírez, o el jefe de la policía de investigación de la PGR, Carlos Gómez Arrieta. También estuvo Bernardo Cano, asistente de Zerón, convertido recientemente en testigo protegido de la Fiscalía General de la República (FGR) para el caso.
El diario indica que buscó al hoy secretario, pero “no ha querido hacer comentarios a este diario sobre estos documentos”.